En Colombia como en otros países el leasing para camiones toma mucha importancia sobre todo en los transportadores grandes y organizados que ven en el leasing para camiones una herramienta de financiación más benéfica en términos tributarios que el mismo crédito tradicional, debemos tener muy claro las diferencias que existen entre un leasing para camiones y un crédito para camiones. En el crédito para camiones el tomador del crédito pasa a ser el dueño del camión con una restricción de propiedad que impide la libre venta del bien sin antes constatar que la obligación adquirida ha sido saldada. En el leasing para camiones, el camión no será propiedad del tomador del leasing si no de la entidad financiera, la cual entrega el camión al tomador del leasing a manera de arrendamiento, el contrato de leasing para camiones es la representación de un arrendamiento con opción de compra, claro está que la opción de compra es una formalidad puesto que en realidad se pacta la compra por un 10% o por un 1% del valor del camión. Comprar un camión por leasing tiene aspectos positivos y negativos, lo más importante antes de tomar la decisión es tener en cuenta nuestro propio perfil y las necesidades que se tienen ejemplo: si un cliente tiene varios camiones y declara renta probablemente lo mejor es que realice un leasing para camiones siempre y cuando tenga claro que si se atrasa en el pago de las cuotas la entidad financiera puede solicitar la devolución del bien más rápidamente que si se tratara de un crédito tradicional.

Al tratarse de un leasing para camiones estamos hablando de un arrendamiento y el pago de los arrendamientos siempre serán tenidos en cuenta como gastos lo cual quiere decir que el 100% del valor de las cuotas mensuales del leasing serán tenidas en cuenta como gastos que disminuirán su base graduable, a diferencia del crédito para vehículos el cual incrementa el patrimonio y parte de los pagos son considerados utilidades.